Mi día sábado transcurrió normal,
como día sábado, les aseguro que soy joven pero muy a pesar de ello, los años por venir están siendo presente más que
futuro. Desperté a las 07 am, dos horas después
estaba con un grupo de personas mucho mayor que yo, fuera del super aguardando
que abran, me esperaban las góndolas de artículos de limpieza, lácteos y algo
de congelados, el tema es que en el recorrido se me pegó un fernet que viene
con un vaso genial, la Coca Cola que tan bien se lleva con el fernet, y un
short, bueno qué sentido tiene engañarlos, dos short y una buclera que hace
unos rulos más chicos que las que tengo, me detuve frente a ella totalmente obnubilada,
como cuando me paraba frente a Stamaris a ver el equipo de música de mis
sueños. Imposible fue dejar de imaginar
lo exuberante que se verán esos rizos en mi colorada melena.
Una vez en casa elegí música en
you tube y comencé a poner orden, limpié
un poco, puse a lavar ropa, y de pronto una canción me transportó lejos en
tiempo y espacio, era yo en otro escenario, con otros actores, me invadieron
los recuerdos, de pronto el pasado me absorbió, a partir de ese momento mi día
se impregno de antiguos sonidos, una voz en particular, me embriago el aroma de
ese momento, sentí ahogarme en el mar de antiguos deseos, me atrapó la pasión
de aquellos años, sentí angustia por la ausencia que impuso el tiempo.
Por la tarde salimos de caminata
con mi hermana, linda charla, lindo sol, lindos, aunque inoportunos mis recuerdos sobre aquellos momentos. Dos
horas de bici no bastaron para quitarte de la danza de mis recuerdos, el pasado
insistía en hacerse presente.
Por la noche cena de mis papis,
sobrinos, cuñado y el recuerdo de aquella sonrisa vagando por algún recoveco de
mi memoria.
Improvisé cena, Mr. B. pronto
llegaba, seguramente hambriento, unas milanesas y tomate siempre es una buena
opción. Lo espere con la mesa lista, lo acompañe tomando mates, escuche sobre
su jornada laboral, buscó algo para ver en la tv. y considerando la hora 01 am.
Noche de halloween, solo se encontraban películas de terror, así es que lo deje
que mire tranquilo y me fui a la cama a escuchar a Luisa Delfino. No miro
películas de terror o suspenso, menos aún sobre exorcismo o de eventos
paranormales porque despiertan algo en mí, que prefiero evitar.
Cosa rara nuestro subconsciente,
hoy desperté sorprendida por mi sueño, les cuento no tiene desperdicio.
Resulta que era verano, me
encontraba de viaje con Tati, Juli (amiga de Tati quien es hija de un primo y a
pesar de nuestra diferencia de edad, tenemos historias en nuestro haber, compartidas
en calles porteñas) vacacionando en playas divinas, recorríamos distintos
balnearios, ciudades. Nuestros días pasaban bajo el sol y jugando en el mar,
por las noches de joda por distintos boliches, nos divertíamos muchísimo, me
veía totalmente desprejuiciada, bailando con ellas por las calles de Cartagena.
Perfectas nosotras, nuestro
viaje, los chicos, bellos momentos. En uno de los boliches conocí a un chico
musculoso, de espalda prominente, fornidos brazos, y muy tostado, él no
bailaba, aunque lo intentó pero era muy ridículo así es que hablamos, nos
besamos, sería tan solo ese momento ya que por la madrugada partíamos a otra
ciudad. Es así que nos despedimos y seguimos camino con mis amiguitas. Estábamos
en la playa jugando con una pelota, súper tostadas, riéndonos mucho, bajaba el
sol cuando nos disponemos a ir al hospedaje a cambiarnos para seguir rodando
vida, y veo al musculoso chico de piel tostada parado frente a mí, esperando
por mi junto a su gran moto. Lo veía e instantáneamente me enamoraba, de su
mirada, de sus ojos tiernos, mirándome de esa forma que solo él lo hace. No me
van a poder creer!! Era Mr.B. quien me esperaba, en mi sueño me volví a
enamorar de él! Creo que en un principio no reaccioné que era él por el tema
este que no tiene más las abdominales marcadas, ya me había olvidado que cuando
lo conocí era igualito al chico de mi sueño!!!
Las chicas nos observaban y de
pronto Tati me dice: “Mari, si te quedas con él, que vas a hacer con Ricky que
viene a encontrarse con vos hoy” y de fondo se escuchaba la siguiente letra;
“Que bella eres
Me recuerda las olas y el mar
Yo nunca olvido
Como aquel día
Los dos empezamos a amar”
Me recuerda las olas y el mar
Yo nunca olvido
Como aquel día
Los dos empezamos a amar”
Me iba a encontrar con Ricky
Martin, y opte por Mr.B.
Así es que escuchando el
tema Frío frente a la imagen de mi marido más joven y de abdomen esculpido. Unos
pasos más allá venia Ricky Martin cantando para mí, desperté a la realidad,
frente a mí el hombre de mis sueños pero con abdomen poco marcado, a mis pies
dos caniches y sobre mí abdomen una gatita mirándome fijamente.
Allí estaba Mr. B. como de
costumbre, lo encontré mirándome mientras duermo, ni bien abro mis ojos me pregunta si dormí bien, le dije: “tranquilo
en mis sueños me volví a enamorar de vos aunque le corte el rostro a Ricky
Martin que me lo trancé unas playas antes, no sé si entendió me abrazo y me
dijo: “ ahhh gordita vos siempre tan turra”, nos reímos y me pidió le cuente el
sueño.
El hombre de mis sueños se
fue a trabajar, yo aprovecho de contarles sobre mis andanzas oníricas, un buen
domingo me espera.